Las tareas para evacuar a miles de personas que viven en los alrededores del volcán Galeras, que hizo erupción en Nariño, departamento colombiano fronterizo con la provincia del Carchi, continuaron ayer aunque vulcanólogos rebajaron al segundo nivel la alerta en la zona, adonde viajó el presidente Álvaro Uribe.
El tránsito ayer fue normal en Pasto, ciudad a 7 km del volcán y capital de Nariño. Las calles lucían sin la capa de ceniza que la cubrió tras la erupción de la madrugada del jueves, y el comercio realizaba sus tareas habituales.
Según expertos, una nube de gases y vapores fue visible en la mañana desde el cráter externo del volcán, pero los vientos la arrastraban hacia el este, lejos de Pasto.
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Al bajar el nivel de alerta de 1 a 2 quiere decir que ya no hay una erupción en desarrollo, aunque no se descarta que pueda presentarse en días o semanas.
Mientras, Oswaldo Acosta, presidente de la Cruz Roja del Carchi, sostuvo que el Centro de Operaciones de Emergencia (COE) de esta provincia no tiene un plan de contingencia para paliar los efectos que podría causar la erupción de este volcán.
Las citas para lograrlo fueron un fracaso, señaló Acosta. Lo que se tiene son planes de cada entidad de socorro, aunque según fuentes de la Cruz Roja en Nariño, la ceniza se desplazaba al norte.