El canciller de Chile, Ignacio Walker, dijo el viernes que era una "vergüenza" que los países de América Latina aún se encuentren enfrascados en disputas territoriales cuando la integración comercial debería ser el principal punto de la agenda de la región.

"Cuando uno ve que nuestros países están con problemas de fronteras o límites desde el siglo XIX o XX es una vergüenza", dijo el diplomático. Chile ha enfrentado recientemente tensiones diplomáticas con sus vecinos Perú y Bolivia, que demandan reivindicaciones territoriales y marítimas.

Walker nunca se refirió específicamente a los pedidos de revisiones fronterizas de sus vecinos, pero dejó sentada la postura de su país de no revivir los conflictos territoriales que lo llevaron a enfrentamientos bélicos con Perú y Bolivia a lo largo de su historia.

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El canciller chileno se encuentra de visita en Quito analizando con su par de Ecuador, Francisco Carrión, las implicaciones de una ley aprobada por Perú que, según su visión, de ser aplicada modificaría los límites marítimos acordados y vigentes entre Santiago y Lima.

Chile insiste en que sus fronteras marítimas fueron fijadas en convenios suscritos con Ecuador y Perú en 1952 y 1954 y en los que se determinó que sus límites se regirían por una línea paralela trazada a partir del punto más extremo de su ribera continental.

Perú insiste que esos convenios eran pesqueros y no territoriales.

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Walker obtuvo en sus encuentros una ratificación de la postura de Ecuador de cerrar filas contra cualquier iniciativa para entrar en una revisión de las fronteras, pese a que Lima no ha expresado hasta el momento ningún interés de presentar un pedido en este sentido a Quito.

"Hemos hablado del tema del mar en un sentido amplio", insistió Walker, en una alocución en el seno de la Cámara Ecuatoriana-Chilena, en la que ratificó que el presidente Ricardo Lagos arribará a Quito en visita oficial la próxima semana.   

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COMERCIO, PRIMER PUNTO EN AGENDA
Chile -uno de los países más abiertos de América Latina- está dirigiendo sus esfuerzos a concretar un "esquema de integración regional y subregional" que permita a la región enfrentar sus problemas sociales, al estilo de la Unión Europea, insistió Walker.

Al referirse a los problemas en la conformación del Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA), el representante chileno se mostró partidario que los países inmersos en la iniciativa retomen los diálogos sin posturas ideológicas.

"Eso fue una desgracia", dijo Walker refiriéndose al fracaso que representó la última Cumbre de las Américas dentro los esfuerzos de revivir el ALCA, que enfrenta una férrea oposición de algunos países de Sudamérica, incluida Venezuela, Brasil y Argentina.