El gobierno chino confirmó ayer una alta contaminación química del río Songhua, en la provincia de Heilongjiang (norte  de China), causada por la explosión de una fábrica petroquímica hace diez días, que podría afectar a Rusia.

La explosión en una fábrica de PetroChina   produjo un escape de benceno en el río Songhua el pasado 13 de noviembre y  causó la muerte de al menos cinco personas.