El rey Juan Carlos I de España celebró este miércoles con una sobria recepción institucional, a la que asistieron representantes de la sociedad española, sus 30 años en el trono, que se cumplieron el martes.
  
En la recepción a la que asistió toda la familia real estuvo también presente la princesa de Asturias, Letizia Ortiz, en su primera aparición pública desde que diera a luz a la infanta Leonor el pasado 31 de octubre, aunque se retiró pronto para atender a su hija.
  
Un portavoz de la Casa Real explicó que la presencia pública de la princesa, que no quiso perderse un acto de tanta significación, es excepcional y no supone que retome su agenda oficial, ya que seguirá atendiendo personalmente a su hija.
  
La recepción en el Palacio Real de Madrid comenzó con el tradicional besamanos en el Salón del Trono, donde la familia real al completo saludó a los alrededor de 200 invitados, que encabezó el jefe del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, y su esposa, Sonsoles Espinosa, seguidos por el resto de miembros del ejecutivo.
  
Entre los invitados estuvieron los presidentes del Congreso, Manuel Marín, y del Senado, Francisco Javier Rojo, así como representantes del mundo de la política, como el presidente del opositor Partido Popular (PP, derecha), Mariano Rajoy, la economía, la sociedad y la diplomacia.
  
Tras el saludo, los reyes y sus invitados compartieron un cóctel.
  
Esta discreta recepción es la única celebración oficial con motivo de los 30 años de la proclamación como rey de Juan Carlos el 22 de noviembre de 1975, por deseo expreso del monarca, que en los últimos días no ha dejado pasar ninguna ocasión para destacar el protagonismo del pueblo español en estos años.
  
"Es el pueblo español quien en estas fechas merece un homenaje de gratitud, respeto y admiración por su esfuerzo, generosidad, responsabilidad y sacrificio", dijo el monarca el martes en el archipiélago de las Canarias, donde, en un concierto en su honor, la Orquesta Sinfónica de Tenerife le tocó el "cumpleaños feliz".