La Cámara de Representantes estadounidense rechazó por amplía mayoría una simbólica resolución que llamaba a un retiro  inmediato de las tropas de Estados Unidos en Iraq.
  
La moción, planteada por legisladores republicanos luego de tres semanas de críticas crecientes sobre la política vinculada a la guerra en Iraq, fue rechazada por 403 votos a tres, y seis abstenciones.
  
Los republicanos llevaron a debate la resolución luego de que un respetado representante demócrata, John Murtha, presentó un proyecto que llamaba al retiro de Iraq de los 160.000 soldados estadounidenses y a destinar un mayor esfuerzo diplomático para poner fin al conflicto.
  
De antemano, los republicanos parecían no abrigar duda de que el resultado de la votación sería un "no" rotundo, pero el hecho de someter la propuesta a votación permitía poner en evidencia los dilemas de la oposición demócrata, que denunció una maniobra "sucia", "irresponsable" y "aterradora".
  
Las divisiones partidarias respecto de Iraq irrumpieron luego de varias semanas de crecientes cuestionamientos a las políticas que lleva adelante en este sentido el gobierno de George W. Bush.
  
El presidente estadounidense se sumó al debate durante su viaje a Corea del Sur donde consideró que fijar una fecha para el retiro de las tropas en Irak sería "una fórmula para el desastre".
  
"Vamos a combatir a los terroristas en Iraq, vamos a seguir en combate hasta que obtengamos la victoria por la cual nuestros valerosos soldados pelearon y dieron su sangre", dijo el presidente estadounidense.
  
"En Washington, algunos dicen que el sacrificio es demasiado importante y nos piden fijar una fecha para la retirada antes de que hayamos terminado nuestra misión", dijo el presidente Bush en un discurso preparado para las  tropas estadounidenses estacionadas en Corea del Sur y que pronunciará el sábado por la tarde en Osán, una base aérea militar cercana a Seúl.
  
El debate en el Congreso, que salía de los procedimientos habituales, fue organizado a última hora, cuando buen número de legisladores se preparaban a volver a sus estados por el feriado del Día de Acción de Gracias.
  
Hay que disipar "una impresión extendida en el mundo, entre nuestros aliados como (entre) nuestros enemigos, de que el Congreso retira su apoyo a la guerra en Iraq", dijo antes de la votación el presidente de la comisión de Defensa, el republicano Duncan Hunter.
  
Varias iniciativas en los últimos días llevaron los cuestionamientos sobre  la guerra en Iraq a niveles sin precedentes, colocando al gobierno a la  defensiva.
  
El martes pasado, el estado mayor republicano del Senado se unió a una propuesta  demócrata que pide a Bush que presente una estrategia de éxito en Iraq, en perspectiva de una futura retirada.
  
Y el jueves Murtha, ex marine con múltiples condecoraciones y ex combatiente en Vietnam, causó un efecto explosivo al reclamar la salida inmediata de las tropas de Iraq.