El proyecto de ley de educación del gobierno español es beneficioso, según dos grupos de emigrantes.

El proyecto de reforma a la Ley Orgánica de  Educación presentada por el gobierno español, José Rodríguez Zapatero que provocó un multitudinario rechazo el domingo pasado en Madrid es beneficioso, según dirigentes de emigrantes ecuatorianos.

Esa normativa contempla, entre otras medidas, que la religión sea una asignatura voluntaria para los alumnos y no computable en las calificaciones, algo que rechazan grupos opositores encabezados por el Partido Popular  y la Conferencia Episcopal española.

Reclaman también la introducción de cuotas de plazas reservadas a los niños con dificultades –especialmente hijos de inmigrantes– en las escuelas privadas financiadas por el gobierno.

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Un informe de la comisión europea ha confirmado el deterioro de la enseñanza en España que ocupa el puesto 23 entre los 25 países de la UE, con este argumento los opositores cuestionan que la ley no prima el esfuerzo y la calidad, y que fomentará el fracaso al permitir a los alumnos pasar de curso en curso hasta con tres asignaturas suspensas.

En España, en los últimos diez años el número de alumnos extranjeros aumentó de 30 mil a 400 mil, de estos el 50% es de América y  unos 194.000 son de Ecuador y Colombia.

Entre los compatriotas el proyecto de ley “en general” resulta beneficioso, según voceros de grupos consultados.

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La reforma garantiza que los niños podrán acudir a las escuelas en el sector donde viven y no en función de la selección de cupos, habrá mayor facilidad y no se dará “esa discriminación encubierta” en las escuelas concertadas (financiadas por el gobierno y los padres de los niños), dijo ayer vía telefónica desde Barcelona, Miguel González, coordinador de la Asociación de ecuatorianos Llactacaru.

González argumentó que en la actualidad resulta difícil conseguir matrícula entre las escuelas concertadas y pese a que no le niegan el cupo,  las trabas y la cantidad de dinero que piden por recargos extracurriculares hacen imposible el acceso a los niños extranjeros. La nueva busca hacer cambios en eso, dijo.

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Añadió que la nueva ley también contempla partidas presupuestarias para favorecer a los nuevos alumnos inmigrantes, que proceden de diversas nacionalidades, para que  así puedan insertarse en el sistema educativo español con clases especializadas.

Juan Manzanillas de la Asociación Rumiñahui, también destacó la reforma, pero insistió en la necesidad de una educación en valores “porque en España los niños no respetan a profesores ni padres”.

Los opositores exigen el retiro de este  proyecto de educación, adoptado en julio y que debe ser próximamente debatido en el Parlamento, con una mayoría gobiernista.

REFORMAS

OPOSICIÓN
Los opositores cuestionan la ley porque esta ampara las faltas colectivas a clase, con el derecho de huelga de los alumnos, por encima de las decisiones de los padres.

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GOBIERNO
Según el Ministerio de Educación español, se alcanzaron noventa puntos de acuerdo, entre los que recordó los alcanzados con seis sindicatos de profesores de enseñanza que representan a más del 80% del total, así como con otros cuatro que suponen más del 90% en la enseñanza concertada.

GOBIERNO
La mayor concentración de inmigrantes escolarizados se ubicó en Madrid, que representó el 8,9% y en Baleares el 8,7%, según datos del periodo escolar 2004-2005.