El Congreso Nacional aprobó, el pasado miércoles, en segundo y definitivo debate el proyecto de Ley Orgánica de la Casa de  la Cultura Ecuatoriana Benjamín Carrión, entidad    que contará, de esta forma,  con autonomía económica y administrativa.

 Marco Proaño Maya, impulsor  del proyecto, destacó la voluntad de los diputados de los diferentes  partidos políticos representados en el Congreso, para darle a la Casa de la Cultura una Ley Orgánica, que nació de un consenso entre los representantes de la Casa de la Cultura y sus núcleos provinciales.

Según el proyecto aprobado, la Casa de la Cultura Ecuatoriana se financiará con las asignaciones que consten anualmente en el Presupuesto General del Estado y la participación del 2% del ingreso anual bruto de las autoridades portuarias que operan en el país.

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Igualmente, se determina que la  Casa de la Cultura Ecuatoriana tendrá un presupuesto especial anual que en su mayor parte, esto es el 70%,  será destinado a programas de índole popular y a proyectos culturales específicos, mientras que el  30% a gastos de operación.

El proyecto, dijo  Proaño, regula además  la existencia y la gestión de la Casa de la Cultura ,  define su naturaleza jurídica, determina los fines, objetivos y acciones de su política cultural; decide sobre la integración y funcionamiento de sus membresías; traza la estructura orgánica  y administrativa del gobierno institucional; así como organiza su régimen económico-financiero y sienta  las bases de un ejercicio responsable de su autonomía.  Proaño dijo  que el proyecto aprobado consta  de 35 artículos.

Fabián Guerrero Obando, coordinador nacional de la Casa de la Cultura Ecuatoriana, refirió que la institución,  a lo largo de su historia, nunca ha tenido una ley, por lo cual la aprobación de esta constituye un hecho histórico no solo para la entidad, sino también  para la cultura del país.

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“La ley lo que hace es regular en términos generales la existencia y gestión de la Casa de la Cultura”, resumió  Guerrero. Dijo que los núcleos presentaron el proyecto bajo el patrocinio de  Proaño Maya.

Guerrero  dijo que estaba seguro de que el presidente de la República, Alfredo Palacio,  sancionará finalmente la vigencia de esta ley.