Dos docenas de milicianos de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) se desmovilizaron este miércoles en un batallón militar en la primer ceremonia de este tipo registrada durante el mandato del presidente Álvaro Uribe, se informó oficialmente.
    
En esta guerra todos estamos perdiendo... solicito perdón a las víctimas y me comprometo a no volver a delinquir, expresó en la ceremonia Raúl Agudelo Medina, quien afirmó comandar la red urbana de las FARC en Ibagué.
  
La información fue difundida en la página de Internet del Alto Comisionado para la Paz, que se encargó de dialogar con el jefe de frente de las FARC hasta que el miércoles se consumó el acto de desmovilización en la base castrense de Ibagué, a 130 kilómetros al occidente de Bogotá.
  
Los milicianos, guerrilleros por lo general jóvenes que no combaten con frecuencia y operan en áreas urbanas, entregaron 24 armas largas y cortas, equipos de comunicación, y una subametralladora, entre otros, según el reporte.
  
Uribe celebró que estos jóvenes dejaran las armas.
    
Guerrilleros, paramilitares que quieran acogerse al proceso de negociación, a los procesos de diálogo, a los procesos de reinserción tienen en la seguridad democrática toda la garantía que Colombia les permitirá vivir tranquilamente integrados a sus familias, afirmó.
  
Según el gobierno, esta es la primera desmovilización colectiva de las FARC en los tres años y medio que lleva el presidente Uribe en el cargo.

En cambio, unos 11.000 paramilitares de extrema derecha han sido desmovilizados en ceremonias colectivas, según cifras oficiales.