Ya se aproximan nuevos sufragios y no se decide aún sobre la nueva distribución parroquial urbana en la ciudad de Guayaquil.

Sería interesante que la nueva distribución de las parroquias vaya de acuerdo con la división natural de la ciudad  o con la separación por áreas de trabajo, como lo tiene establecido el Municipio para realizar sus actividades comunales. Ojalá que para las próximas elecciones podamos contar con este nuevo ordenamiento.

Gilberto Ramos Lozano
Guayaquil