Como “actos vandálicos” calificó esta mañana el ministro de Trabajo (e), José Serrano, a la violencia registrada ayer en el edificio de su cartera, donde más de 80 ex empleados de la Cemento Nacional  intentaron quemar las instalaciones.

Los manifestantes demandaban la cancelación de alrededor de 32 millones de dólares por utilidades no pagadas entre 1999 y el 2004 a 1.200 ex trabajadores de la empresa.

En diálogo con Citynoticias (89.3 FM en Citynoticias), Serrano aseguró que las protestas de los ex trabajadores no están justificadas, ya que el caso con la empresa Holcim, actual accionista principal de la Cemento Nacional (que pasó a ser su filial en Ecuador), no es competencia del Ministerio del Trabajo, al encontrarse actualmente en una instancia judicial

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El despacho del Ministro fue uno de los más afectados, luego que los reclamantes destruyeron el mobiliario y los ventanales, quedando parcialmente destrozado.

Serrano informó que para hoy tiene previsto presentar la denuncia formal ante las autoridades legales pertinentes para comenzar un proceso en contra de los manifestantes por destrucción a la empresa pública.

Finalmente, el funcionario dijo que el Ministerio y la Policía iniciarán investigaciones para conocer “quién o quiénes están detrás de estas personas que cometieron un hecho tan lamentable“.