En el club azul y también en Espoli hacen cálculos y aún no se consideran eliminados del hexagonal final.

Los jugadores de Emelec sienten que aún no están ‘muertos’ en el torneo Clausura y por eso se aferran a la posibilidad del ‘milagro’ para entrar a la liguilla final del campeonato.

A Emelec, uno de los menos opcionados para la clasificación, se le debe cumplir una serie de condiciones para entrar al hexagonal. La primera regla es ganar hoy a Espoli en Cayambe, luego esperar a que Liga de Quito y Deportivo Quito también pierdan o que incluso Deportivo Quito y Barcelona empaten y los azules deben ganar por más de 2 goles de diferencia.

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“Si bien es cierto dependemos de otros resultados, nosotros somos conscientes de que primero tenemos que ganar a Espoli y de allí ver qué pasa en los otros partidos”, comentó Moisés Candelario, durante la práctica del pasado viernes por la tarde en Samanes.

El volante azul confía en ser ratificado hoy titular por el entrenador Jorge Habbeger, quien en este año ha considerado que Candelario no es tan imprescindible en el equipo.

Pero para no perder la costumbre, se prevé que Habbeger realizará una nueva variante en el medio campo de los eléctricos con la presencia del juvenil Michel Quiñónez, junto a la contención con el argentino Gustavo Pinto, quien reaparecerá tras superar una lesión.

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Pero si Emelec se aferra a una mínima posibilidad, Espoli no se queda atrás y también requiere de un gran milagro para ingresar al hexagonal.

Para enfrentar a los azules, los policías presentan dos bajas. No podrán estar Ángel Arboleda ni William Araujo, pues están suspendidos.

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En este encuentro volverá al ataque el delantero mexicano Gustavo Nápoles, suspendido dos partidos por expulsión ante Aucas.