La descentralización y la transferencia de competencias del Estado central a los organismos seccionales están previstas en la Constitución Política desde 1997, pero pocos son los avances que en esta materia han logrado los municipios.

Así lo afirman siete alcaldes consultados sobre el tema. Sin embargo, uno de ellos, Ernesto Estupiñán, de Esmeraldas (MPD), considera que es necesaria una reforma a la Carta Política para que haya “una auténtica descentralización”, no solo de responsabilidades sino también de recursos.

Esto, señala, porque Ecuador es un país con ciudades de primera, segunda y tercera categorías y en el caso de su ciudad y provincia, siempre han aportado al erario nacional pero nada reciben.

Publicidad

“La infraestructura petrolera está en Esmeraldas, pero el Municipio no recibe un solo centavo de la refinería porque su domicilio está en Quito; tiene una riqueza forestal que no genera trabajo en la ciudad, la industria de la madera está en otras partes”, asegura.

Este criterio es compartido por el alcalde de Pastaza, Óscar Ledesma (SP), quien sostiene que las leyes deben garantizar una mayor descentralización de recursos y competencias y por ello considera necesaria una reforma.

“Las municipalidades, en su gran mayoría, han demostrado que son escenarios de gobernabilidad más estables; se han solucionado problemas locales y están más vinculadas con la ciudadanía”, recalca.

Publicidad

Pero el alcalde de Machala, Carlos Falquez (PSC), no comparte esta opinión. Para él, aunque es importante que se le consulte a la gente sobre alguna reforma, advierte que el problema con estos procesos es que “se crean grandes expectativas, pero luego quedan grandes frustraciones”.

Por tal motivo, agrega, es más bien partidario de que los municipios asuman las competencias en las áreas que puedan atender, como turismo, educación, salud, que sí lo permite la Constitución.

Publicidad

Igual que Falquez, Pedro Velasco (ID), alcalde de Tulcán, dice que es cuestión de voluntad política del Gobierno central y no de crear más leyes el aplicar la descentralización y transferir las competencias a los gobiernos seccionales.

Los artículos 225 y 226 establecen que el Estado debe impulsar la descentralización y que es obligatoria cuando una entidad seccional lo pide.

Mientras, el tema de las autonomías volvió a la discusión cuando el presidente Alfredo Palacio lo incluyó dentro de un paquete inicial de 17 temas que debía discutir el Congreso para definir las preguntas para una consulta popular, pero la pugna Ejecutivo-Legislativo lo dejó fuera del referéndum.

Estupiñán dice que un sistema de autonomía no es viable porque Ecuador es uno solo y sus recursos deben ser distribuidos para todos los sectores en función de las necesidades insatisfechas de la población y de lo que produce.

Publicidad

Falquez opina lo contrario, pero Johnny Terán, de Babahoyo y también socialcristiano, se inclina por la descentralización; “sí es necesaria (una reforma), sobre todo para tener un reparto más equilibrado de los recursos del país”.