El sistema de transporte masivo con el que contará Guayaquil desde el 2006 podrá operar -hasta 20 años- sin que tenga algún tipo de subsidio para la ciudadanía.

Ese es el criterio del presidente de la fundación municipal Transporte Masivo Urbano de Guayaquil, Federico von Buchwald, quien asegura que el Municipio no va a subvencionar la tarifa de transporte.

“El negocio de la transportación es una oferta que responde a una demanda; hoy en día hay una oferta de 4.600 buses para una demanda de dos millones de habitantes que trabaja sin subsidio”, dice.

Publicidad

Sin embargo, el pasado 20 de octubre, en un reportaje sobre los impactos de la Metrovía, la urbanista Patricia Sánchez indicó que en ciudades como Sao Paulo y México fue necesario contar con una ayuda continua del Estado para sostener la operación del sistema debido a los altos costos.

Von Buchwald reconoce que aquello sucedió en ciudades que han tenido metro, que generalmente no es rentable.

Pero niega que eso vaya a suceder en Guayaquil porque -indica- la Metrovía contempla un sistema de transporte masivo urbano, a través de buses articulados, con troncales y alimentadores.

Publicidad

Según dice, se van a utilizar corredores en sectores que actualmente usan gran cantidad de buses y se los reemplazará por un número menor de nuevas unidades con mayor capacidad. Los buses usarán carriles exclusivos y semáforos programados para lograr mayor velocidad de operación.