Los transportistas urbanos y pesados de la ciudad decidieron esta mañana plegar a un paro de actividades si el Gobierno no soluciona en las próximas horas el desabastecimiento de diésel presente hace cuatro semanas en las gasolinera de la provincia del Guayas.

Ante la amenaza de una paralización, el ministro de Energía, Iván Rodríguez, ordenó el despacho de 900 mil galones de combustible adicionales a los tanqueros que realizan largas filas en la terminal Tres Bocas de Pascuales.

Pero pese al anuncio, un reporte de Gamavisión mostró que la irregularidad en la entrega del carburante persiste, y por ende, el descontento de miles de usuarios, que comienzan a ser afectados económicamente por la escasez.

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Aparte de los distribuidores, comercializadoras y transportistas, sectores productivos como el agrícola comienzan a reducir sus ingresos por no contar con el suficiente combustible para la operación de maquinarias.

Durante las próximas horas se espera la vuelta a la normalidad de la cuota de diésel, caso contrario el anuncio de los transportistas pasaría a ser realidad desde mañana.