El Presidente del Parlamento llevó ayer al Mandatario la sugerencia de reformar la Carta Política vía Asamblea Constitucional en un periodo de dos años. El Ministro de Gobierno dijo que en los próximos días se responderá, pero que la primera opción sigue siendo la propuesta de la sociedad civil.

El presidente del Congreso, Wilfrido Lucero (ID), llegó ayer a Carondelet con una propuesta que cambia el panorama a la consulta popular que plantea el presidente Alfredo Palacio. En nombre del Parlamento dijo que están de acuerdo con reformar la Carta Política, pero a través de una Asamblea Constitucional y no de una Constituyente.

“Lo primero que he dejado en claro es que el Congreso que presido nada tiene que ver en el origen y desenvolvimiento de los problemas de orden político que se han presentado en los últimos días”, señaló Lucero, al explicar que en la cita le recordó a Palacio que fue el Ejecutivo el que hace dos semanas incumplió su compromiso de enviar a los diputados el proyecto de consulta popular que había pactado el ex ministro de Gobierno, Oswaldo Molestina (ID).

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“De tal manera que las acusaciones que se hacen en contra del Congreso no tienen fundamento”, dijo Lucero, tras concluir la cita que duró poco más de una hora.

En ella participaron el prefecto de Pichincha, Ramiro González (ID), y el ministro de Gobierno (e), Galo Chiriboga. Este último ratificó que la propuesta del Parlamento es que Palacio envíe de forma urgente un proyecto de referéndum que viabilice la realización de una Asamblea Constitucional y no de una Constituyente, como lo ha planteado el régimen con el apoyo de organizaciones sociales.

Según Lucero, la Constitucional que propone tendría “el exclusivo objetivo, reformar la Carta Política que nos rige”, su periodo de duración sería de dos meses y estaría conformada por un número aún no determinado de asambleístas que para candidatizarse deberían cumplir “todos, sin excepciones, los mismos requisitos y exigencias”.

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En este punto ayer Ejecutivo y Legislativo llegaron a un acuerdo concreto, esto es que ambas funciones del Estado trabajarán de forma conjunta en la redacción de un estatuto electoral diferente al que el Gobierno presentó la semana pasada en  el Tribunal Supremo Electoral (TSE).

“No puede haber ecuatorianos de primera y de segunda, unos que quieran entrar por la puerta grande y otros por la ventana a la Asamblea”, afirmó Lucero, para quien la realización de una Constituyente, como lo piden los movimientos y organizaciones de la sociedad civil, no es jurídicamente posible porque “esta solo funciona cuando no hay poderes constituidos, es decir, cuando se está en dictadura”.

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Renovación
Anoche, el presidente Alfredo Palacio  volvió a comprometer la intención del gobierno de insistir en la consulta popular para conformar una Asamblea Constituyente, ya que “el Ecuador requiere renovarse”.

Palacio intervino anoche como el orador principal de la ceremonia de celebración de los 60 años de creación de las Naciones Unidas, que se realizó en el Museo de la Ciudad, en el Centro Histórico de la capital.

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