El diputado socialcristiano León Febres-Cordero dijo ayer que el presidente de la República, Alfredo Palacio, está mal asesorado, por su insistencia en convocar a una Asamblea Constituyente y planteó a  la Asamblea Nacional como una alternativa para bajar las tensiones y evitar confrontaciones.

“El aceptar una Constituyente en estricto derecho constitucional es aceptar que vivimos en un gobierno de facto. Le pretenden poner inconscientemente la bandeja a los argumentos de (Lucio) Gutiérrez, es increíble lo que hace la falta de experiencia política”, argumentó.

El legislador precisó que Palacio “no tiene a nadie alrededor  que le haga ver lo que permite la Constitución o no... caemos con un presidente que nos genera este tipo de confrontaciones”.

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Según el planteamiento de LFC, que se presentará hoy en el Congreso, el Ejecutivo deberá enviar al Legislativo una consulta popular para que se la declare urgente.

Allí se solicitará “que se reforme la Constitución para incluir una transitoria donde se le dé facultades, por esta vez, al Presidente para convocar a una consulta con una pregunta sencilla y clara: si el pueblo autoriza o no que se llame a una Asamblea Constitucional Nacional para reformar exclusivamente la Constitución”, precisó.

Luego, el Mandatario deberá pedir al Tribunal Supremo Electoral la convocatoria a la Asamblea que se integrará, por votación popular, por miembros de partidos políticos e independientes descartando la participación de la sociedad civil, señaló.

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“Si usted termina con los partidos, usted acabó con la democracia”, advirtió y agregó que el Congreso seguirá legislando.