Unos satisfechos, otros conformes y algunos indignados. Varios gestos se mostraron hoy en las instalaciones de la Caja del Seguro de Quito y Guayaquil, donde los jubilados se acercaron a cobrar sus pensiones con el aliciente de recibir el aumento prometido por el Gobierno el mes anterior.

Según un reporte de TC Televisión, en la capital varios jubilados se mostraron contrariados porque en su recibo de pago no consta el aumento prometido ni el retroactivo desde el pasado junio, por lo que calificaron el hecho como “una nueva burla del Gobierno”.

Mientras tanto, en Guayaquil, la situación fue diferente. La gran mayoría de jubilados que se acercaron a cobrar sus haberes no tuvieron quejas, porque en su saldo de cuenta se encontraron con la noticia de que el aumento y retroactivo habían llegado juntos.

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En las oficinas de Servipagos, en el centro de la ciudad, se formaron largas filas de jubilados, quienes se acercaron al trámite, previsto para el 20 de cada mes, pero la atención no fue eficiente. Algunos se quejaron que a pesar de contar con 11 ventanillas, solo cinco brindaban atención, por lo que la espera para cobrar se hizo mayor.

El aumento en las pensiones jubilares contempla el incremento de 30 dólares a los retirados que reciben hasta $ 300, $ 25 para los que reciben hasta $ 600, y para quienes superan esa cantidad, el aumento es de 20 dólares.