Un cubano estadounidense que fue premiado con una medalla de bronce en Irak, pero a quien no se le permitió regresar a Cuba para cuidar de un hijo enfermo dijo este lunes que sus hijos recibieron permiso para visitarlo en Estados Unidos por tres meses.

En un acuerdo entre el Departamento de Estado y el gobierno cubano, los dos hijos del sargento Carlos Lazo, Carlos Rafael Lazo, de 17 años, y Carlos Manuel Lazo, de 19, le visitarán por tres meses.

Lazo, un sargento de la Guardia Nacional del estado de Washington, planea viajar a Miami el viernes para reunirse con ellos.

Publicidad

El pedido de la familia atrajo la atención de los medios noticiosos y los abogados de ambas partes se quejaron sobre las drásticas restricciones impuestas en los viajes a Cuba bajo el gobierno de George W. Bush.

Las restricciones han sido intensificadas a fin de sancionar al gobierno comunista de Fidel Castro, al limitar las visitas de las familias a una vez cada tres años.

Principalmente, estoy muy agradecido por el resultado de este caso, destacó Lazo en una entrevista con The Associated Press.

Publicidad

De otro lado, me entristece porque hay miles de cubano-estadounidenses, especialmente en Miami, quienes debido a esas restricciones no pueden ver a sus familiares, agregó.

Lazo, de 40 años, residente de Seattle, vino a Estados Unidos en una balsa en 1992. Actualmente es ciudadano estadounidense y trabaja en el departamento de servicios de salud y sociales del estado de Washington. En el 2000 se registró en la Guardia Nacional y fue entrenado como paramédico.

Publicidad

En abril del 2004 fue enviado a Irak y obtuvo la estrella de bronce por correr riesgo bajo el fuego de un francotirador y andanadas de mortero mientras daba atención médica a las tropas durante la batalla de Faluya.

No veía a sus hijos desde abril del 2003.