La agrupación mexicana festejó sus diez años de trayectoria en el Ágora de la Casa de la Cultura.

A LAS 21h05 se escuchó: “Radio Molotov les saluda...” y empezaron los gritos, la emoción, el mosh (aquel choque de unos con otros) y la música explosiva, volátil y agresiva del grupo mexicano, que la noche del jueves pasado se presentó en Quito.

“Empezó el desmadre”, dijeron los cuatro integrantes de Molotov: Paco, Randy, Micky y Tito, mientras coreaban: “Amateur, amateur, amateur, ooh, ooh, amateur”, de la canción Amateur, que pertenece al disco Con mucho respeto, el más reciente que también da nombre a la gira, y que es la adaptación de Rock me Amadeus, interpretada en la década del ochenta por Falco. Amateur fue la primera melodía de la noche.

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Del escenario del ágora de la Casa de la Cultura salía humo, mientras unos cinco mil asistentes quemaban energías cantando y gritando: “Viva Ecuador, viva México”.

A la media hora del show, que duró dos horas, el público pedía: “Puto, puto, puto”.
“Todavía faltan cinco mil canciones y el resto de la noche para cantar Puto”, respondió sarcásticamente Randy, el baterista de la banda.

Las ganas del público se saciaron con Frijolero, la canción dedicada al presidente de Estados Unidos. “Para ti, George W. Bush”, dijeron.

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Los ánimos cada vez se iban caldeando, como una bomba molotov. “Ahí te va tu Plan Patriota, tu Katrina...” gritó un joven.

Molotov repasó su discografía formada por ¿Donde jugarán las niñas? (1997), Apocalyshit (1999), Dance and Dense Denso (2003) y Con todo respeto (2004). Los fanáticos se sabían todas.

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La banda mexicana cumplió diez años de vida hace una semana y en Quito festejó.

Hubo cierta necesidad del público de salir del apretón de preferencia ($ 20) y general ($ 15) para pasar al selecto grupo de VIP ($ 40), espacio que pese a los esfuerzos policiales terminó lleno.

Paolo Moncagatta, uno de los integrantes de Ro*cola Bacalao, grupo quiteño que abrió el show, gritó su crítica “acá adelante está vacío, los precios eran para un concierto en Nueva York”.

No faltaron las chicas que subieron al escenario, aunque allí algunos músicos fueron  grotescos con una de ellas al resaltarles el tamaño de su busto. “No solo tiene por delante, también por detrás”, le dijeron.

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Pasaban las 22h30 y todos exigían Puto. “Esta es la canción para todos los que nos gobiernan mal en nuestros países”, introdujo Micky, uno de los dos bajistas del grupo.

“Si le das más poder al poder, de seguro te van a venir a joder, puto, puto, puto”, corearon, moshearon, todos hasta que se acabó el espectáculo.

El grupo mexicano Molotov, que tiene el nombre de una bomba, es considerado como uno de los grupos más agresivos del rock latino. En Quito “explotó”.