Escuela fiscal funciona por esfuerzo de padres

El Director Provincial de Educación dijo que por el momento no hay partidas para nuevos maestros.

Ernesto Cabezas aún recuerda la pequeña estructura de caña, levantada en un terreno ubicado en el km 17½ de la vía a Daule, donde se instaló la escuela fiscal Nº 439 Cinco de Octubre.

Dieciséis años después, con apoyo de empresas, este centro de estudios  se amplió (28 metros de largo por 14 m de ancho), cambió el piso de tierra y sus endebles paredes por el cemento.

Su estructura ha cambiado pero no los problemas que enfrentaban hace dieciséis años, por la falta de partidas para profesores por la Dirección Provincial de Educación, lo que  hasta la actualidad no ha sido solucionado.

La mañana del pasado martes, Geoconda Pineda Quiñónez, acompañada de un grupo de padres de familia y de alumnos de esta escuela, intentó hablar con el director provincial de Educación, Johnny Rodríguez, pero no lo consiguió.

Solo logró conversar con la secretaria de la Comisión de Ingresos y Cambios, Rosa Castro, quien le indicó verbalmente que la escuela sería tomada en cuenta en los nombramientos de maestros primarios en noviembre.

Ella y los padres de familia de los cerca de 150 niños que se educan en este plantel, situado en el barrio Unión de Propietarios, colindante con el sector de Pascuales, guardan sus reservas.

Pineda es desde hace un año la directora de la escuela y la única que cuenta con partida asignada. Además, tiene a su cargo 26 alumnos de quinto año básico.

Luzmila Rosero, quien tiene a su hijo matriculado, manifestó que los padres de familia ante la falta de docentes se han visto obligados a recolectar dinero para contratar a cuatro maestros y pagarles un sueldo de 70 dólares.

Sin embargo, la mayoría de  padres son pobres y no cuentan con un trabajo fijo, por lo que se ven impedidos de continuar recolectando, de manera voluntaria, los tres o cuatro dólares por mes, indica la directora.

“Necesitamos maestros, pero muchas veces no hay para llevar el pan a la mesa y no es justo que debamos pagar maestros siendo una escuela fiscal”, expresó Johana Plúas, quien tiene una niña en primer año básico.

La escuela cuenta con dos aulas pequeñas y una más grande. En esta última, Gladys Guevara y Johana Medina, estudiantes de párvulos, intentan impartir clases a cuatro grados en el mismo espacio.

Guevara está encargada de tercero y cuarto año básico y Medina de sexto y séptimo año básico. La falta de profesores obliga que cada maestro dicte clases a 43 y 30 menores, respectivamente.

Adriana Morales, que enseña a primer año básico, es la única maestra del Programa Nacional de Educación de Parvularias (Pronepe).

Manuel Ortiz, radiotécnico y padre de tres niños, manifestó que en el sector solo hay esa escuela y sería “terrible si nos quedáramos sin maestros y peor aún sin el plantel”.

16 AÑOS
La escuela 5 de Octubre tiene 16 años de funcionamiento en el sector pobre conocido como Unión de Propietarios, ubicado en el kilómetro 17 de la vía a Daule, frente a la penitenciaría del Litoral.

150 NIÑOS
En este centro de estudios se educan cerca de 150 menores que dejarían de asistir a clases si los padres de familia ya no pueden aportar con la cuota voluntaria de $ 3, una alternativa para suplir la falta de docentes.