Para los delegados del área de Matrimonio del Registro Civil del Guayas el parentesco de los contrayentes no es verificable, sobre todo el relacionado con la afinidad.

Hilda Vega, jefa del departamento, señala que al momento de que dos personas se presentan para contraer matrimonio, solo se les exige que cumplan con los requisitos básicos.

Es difícil poder verificar si la pareja está o no dentro de las prohibiciones que establece el Código Civil vigente, manifiesta.

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Según la funcionaria, la duda se forma únicamente en los casos en que ambos tengan iguales apellidos. “Cumplimos con preguntarles si entre los dos existe algún parentesco, pero si contestan que no, tenemos que casarlos”, indica Vega, quien no descarta que en ese sentido se haya producido una unión ilegal.

El delegado Wilson Berruz explica que como simples registradores civiles es difícil comprobar si la pareja miente o no, por cuanto ellos no son agentes de investigación, sino que en esencia se limitan a ser receptores de buena fe de las personas.

Al respecto la ley del Registro Civil tampoco ayuda, pues en sus articulados solo especifica requisitos de forma para el matrimonio, tales como los documentos que se deben presentar.

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Ante ello el asesor jurídico de la entidad, Juan Rodríguez, sostiene que depende de cada pareja respetar las prohibiciones que establece la ley por el parentesco. “¿Cómo probamos que una mujer se casa con su suegro o un hombre con su entenada?”, dice Rodríguez.