La conservadora Angela Merkel, oriunda de la ex RDA,  será la primera mujer canciller de la historia de Alemania tras haber ganado el  pulso que acabó con las pretensiones de Gerhard Schroeder de permanecer en la  cancillería.
  
Prácticamente desconocida hace 15 años, esta mujer reservada de 51 años y  protestante, logró imponerse a fuerza de trabajo y ambición en el seno de la  Unión Demócrata Cristiana (CDU), tradicionalmente dominada por hombres  católicos de la ex Alemania occidental para convertirse hace cinco años en la  primera mujer presidenta de uno de los grandes partidos políticos europeos.
  
Durante la campaña, en contraste con el carismático Schroeder, tuvo  dificultades para movilizar a las masas con su habitual sobriedad.
  
Sólo logró un 35,2% de los votos para los socialdemócratas en las  elecciones del 18 de septiembre. Tras haber aparecido inicialmente abatida por  la ofensiva que le lanzó Schroeder, Merkel se recuperó y tras un duro pulso de  tres semanas obtuvo la cancillería.
  
Angela Merkel se afilió a la CDU dos meses antes de la reunificación  alemana en 1990 y apenas tres meses más tarde entró en el gabinete del  canciller Helmut Kohl, su mentor. Por aquel entonces, la prensa le llamaba "la  hija de Kohl".
  
Diez años más tarde, fue rebautizada "madre coraje" al tomar las riendas de  un partido en plena crisis en abril de 2000, poco después de que se revelara la  existencia de cajas negras.
  
"Angie", como la llaman sus seguidores, tuvo sin embargo que ceder la  candidatura conservadora para las elecciones legislativas de 2002 al líder del  partido hermano de la CDU, la Unión Cristiana Social (CSU) de Edmund Stoiber.
  
Merkel fue nombrada ministra de Asuntos de la Mujer y de la Juventud en  enero de 1991, y luego ministra de Medio Ambiente en noviembre de 1994. "Tuve  la suerte de que Kohl me confiara un pequeño ministerio" para aprender las  reglas del juego", dijo recientemente.
  
"Cuando era ministra tuve la impresión de encarnar yo sola a dos minorías:  mujer y ex ciudadana de la RDA", agregó.
  
Hoy se declara "orgullosa de ser una responsable política para toda  Alemania con raíces en la RDA".
  
Fue allá donde comenzó su carrera política en abril de 1990, como portavoz  del gobierno del primer ministro conservador este-alemán, Lothar de Maziere,  antes de ser elegida diputada en las primeras elecciones libres en la ex RDA,  celebradas en diciembre de ese año.
  
Su estilo sobrio puede parecer frío. Sus discursos son concisos y su mente  analítica, probablemente por su formación científica.
  
Casada en segundas nupcias con un profesor de química y sin hijos, Angela  Merkel, quien durante su campaña supo rodearse de una red de mujeres, nunca  quiso valerse de su femineidad a la hora de hacer política.
  
A menudo criticada por su aspecto físico y su forma de vestir, Merkel  reconoce que la moda no le interesa pero que le preocupa más que antes.
  
Nacida el 17 de julio de 1954 en Hamburgo (norte), Angela Kasner, que  adoptó el nombre de Merkel tras su primer matrimonio, se crió en Templin, una  pequeña localidad de la ex RDA donde se trasladó a las pocas semanas de vida.
  
Su familia, encabezada por un padre pastor protestante e idealista en la ex  Alemania comunista, le exigía que brillara en todo.
  
Debido a sus vínculos con la Iglesia, tuvo que renunciar a estudiar  lenguas, su gran pasión. Decidió entonces cursar estudios de Química en la  Universidad de Leipzig, donde conoció a Ulrich Merkel, quien se convirtió en su  primer marido en 1977 y de quien se divorció en 1982.
  
En 1978 entró en el Instituto de Física y Química de la Academia de  Ciencias de Berlín, donde ocho años más tarde obtuvo un doctorado.