Los costos por servicios de tarjetas son públicos

¿Se le perdió la tarjeta de  crédito en la playa o en el mercado? No se  preocupe pague 5  dólares y le entregarán otra. ¿Se le perdió cuando estaba en el exterior? Pague $ 50. ¿Necesita un certificado para un trámite  personal? Pague $ 2. ¿Requiere un avance en efectivo? Pídalo, a fines de mes tendrá que pagar un recargo de 1, más el 2%  de lo que sacó.

Mientras que si quiere sacar  una tarjeta de crédito por primera vez le costará  $ 30, aproximadamente.

Las cifras pueden variar de  una tarjeta a otra –Visa, MasterCard, Diners, American Ex press–, dependiendo del banco y del pedido del cliente.

La información del costo de  cada servicio –por mínimo que  sea– y su justificación es una  obligación de las instituciones  financieras, desde el 1 de agosto de este año, por disposición de la Superintendencia de  Bancos (SB).

En lo que se refiere a las tarjetas,  existen al menos 20 servicios  que tienen costos adicionales, de acuerdo  con una matriz básica emitida  por el organismo de control del sistema financiero nacional.

Allí constan, por ejemplo: el  interés y los precios por renovación, reactivación, certificados, mantenimiento, copias de  estado de cuenta, vouchers,  avances en efectivo, gastos por  cobranzas; en algunos casos  deben estar identificadas las  operaciones que se realizan en  el país o en el exterior.

La Tribuna de Defensa del Consumidor  propone que los tarjetahabientes exijan toda la información posible para evitar contratiempos y reclamos  que, muchas veces, son infructuosos, pues en los contratos  está el compromiso de pagar  por los servicios.

El pasado 27 de septiembre,  la SB emitió una circular a los  representantes legales de todas las instituciones financieras (bancos, cooperativas, financieras, mutualistas y otras entidades)  en las que pide no solo informar a los clientes sobre los cobros que se realicen, sino que se exige hacerlo de una manera comprensible.

Hasta junio pasado, se registraron en el país 1,1 millones de tarjetas emitidas, y más de la mitad  se concentra en  las provincias de Pichincha y  Guayas. Visa y MasterCard se reparten el 70% del mercado.