Los afectados son quienes iban a retirar o depositar dinero en bancos, couriers o cooperativas.

Un total de 222 personas  han sufrido el robo del dinero que retiraron o que iban a depositar en las diferentes instituciones del sistema financiero (bancos, cooperativas y couriers), en Guayaquil, entre el 1 de enero al 30 de septiembre del 2005.

La cifra, obtenida en la Policía Judicial del Guayas (PJ-G), no detalla los sistemas de robo que aplicaron los delincuentes a los perjudicados, explicó el subjefe de esa unidad, coronel Juan Carlos Rueda.

Según datos publicados por Diario EL UNIVERSO, a base de las denuncias presentadas en la Fiscalía adjunta a la PJ-G y reportes policiales, entre el 1 y 6 de octubre de este año, seis fueron las personas atracadas dentro y fuera de las entidades financieras, en su mayoría bancos.

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Esto sin contabilizar los reportes en la oficina principal del Ministerio Público del Guayas (Pedro Carbo y Aguirre), donde se receptan los delitos 24 horas después de cometidos.

De los últimos seis casos  publicados por este Diario, en lo que va de octubre, cinco se perpetraron en contra de personas que salieron de entidades bancarias y una que salió de un courier.

El más reciente de estos atracos sucedió el viernes pasado, alrededor de las 11h30, luego de que Santos Espinoza retiró 8 mil dólares del Banco Bolivariano, ubicado en las avenidas Francisco de Orellana y Agustín Freire, indicó la Policía.

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Tras este robo, realizado por dos sujetos, se produjo un tiroteo entre estos y el acompañante de Espinoza, quien no fue identificado. A consecuencia de esto, resultó herido Espinoza y murió uno de los ladrones.

Un sondeo realizado en julio pasado por este Diario, refleja el grado de   desconfianza que los clientes y ciudadanos tienen en quienes custodian sus dineros.

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Más de la mitad de un total de cien entrevistados consideró que las entidades financieras deben tener más vigilancia dentro y fuera de sus oficinas y mayor control de su personal, a fin de que sus clientes no sean asaltados cuando salen de estos establecimientos con dinero.

A este pronunciamiento se suma el del alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, quien señaló el pasado 30 de septiembre que existe complicidad entre empleados bancarios y delincuentes.

‘Sacapintas’
El sistema de robo sacapintas fue denominado así por la Policía porque los delincuentes que se infiltran en las entidades financieras informan a sus cómplices qué ciudadanos salen con grandes cantidades de dinero. Para esto, proporcionan una detallada descripción de la víctima y del vehículo en el que se moviliza.

En dos de los 222 casos de atracos a clientes del sistema financiero, tres fueron asesinados: Rosa Cueva Herrera, de 25 años (el 14 de abril en la Garzota), y los hermanos Línder Edwin Briones Mindiola, de 43, y Alexis Sares Mindiola, de 23 (el 6 de agosto en el km 24 de la vía a Daule). Otros clientes: José Geovanny Lasluisas Argüello y Rodolfo Pacheco Mariscal, resultaron heridos con disparos y puñaladas, respectivamente.

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El mayor monto que robaron los delincuentes bajo el sistema sacapintas fue de 25.000 dólares, cantidad que el martes pasado le quitaron a Jonathan Flores Sanyer, empleado de la concesionaria de vehículos Juquilcar, cuando llegaba a su trabajo, en Urdenor 2 manzana 239 solar 1.

Otros métodos
Sin dejar de producirse los robos de sacapintas, entre el 23 de agosto y 5 de octubre del 2005 se denunciaron siete atracos bajo otros sistemas. Seis ocurrieron dentro de las entidades financieras y uno a la salida, según los afectados.

En cinco de los siete hechos las víctimas denunciaron que los delincuentes les suministraron alguna droga antes o después de retirar el dinero.

A Ángel Valladares Romero, cliente del Banco de Guayaquil, y Mariela Ibarra Holguín, del Pichincha, les dieron escopolamina, según análisis de orina y sangre realizados en el Hospital Luis Vernaza y el Instituto de Higiene Leopoldo Izquieta Pérez.