El embajador de carrera Luis Gallegos presentó ayer las cartas credenciales ante el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, según informó el Ministerio de Relaciones Exteriores del Ecuador.

La sede diplomática del Ecuador en ese país estuvo vacía durante once meses, desde que el embajador Raúl Gangotena presentó su renuncia al cargo por pedido del ex presidente Lucio Gutiérrez, el 30 de noviembre del 2004.

Durante la ceremonia diplomática en la Casa Blanca, Gallegos informó a Bush de los esfuerzos nacionales en la frontera con Colombia para “impedir la expansión de los cultivos de coca hacia nuestro territorio y en la región”.

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Además le reiteró la importancia del apoyo de la comunidad internacional para generar en esta zona un área de desarrollo y seguridad.

Gallegos, conocido por su amistad con el presidente Alfredo Palacio, habló a Bush de las relaciones comerciales, sobre la migración ecuatoriana y la necesidad de inversión en el país para mantener la economía dolarizada.

La agenda bilateral con Estados Unidos está marcada por las negociaciones de un Tratado de Libre Comercio, y la necesidad de apoyo militar, que ha disminuido gradualmente en los dos años consecutivos que el Ecuador se ha negado a firmar un convenio de inmunidad para los ciudadanos estadounidenses en territorio ecuatoriano, como excepción del tratado de la Corte Penal Internacional.

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Luego de la salida de Gangotena fueron nombrados como embajadores en ese país Mauricio Pozo, Roberto Betancourt y Álvaro Pérez, los dos últimos no llegaron a recibir beneplácito. Pozo, quien sí recibió el plácet, no llegó a viajar porque fue pocos días antes al derrocamiento del ex presidente Lucio Gutiérrez.