Cada día escuchamos que hay mayores asesores para los cargos públicos.

En algunas ocasiones estos personajes son muy preparados, eminencias de profesionales, pero en la gran mayoría de casos, son personas que solo se están beneficiando económicamente del Estado y no aportan prácticamente en nada al crecimiento del país, solo aportan al crecimiento del presupuesto del Estado en lo que respecta al pago de sueldos para la burocracia “dorada” o “enlodada”.

Siempre escuchamos que deben aumentarse los ingresos del Estado y, ¿cómo lo hacen?, por la vía impuestos, aumento del precio de los productos, de la gasolina, etcétera, impuestos que recaen directamente  sobre el pueblo.

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¿Cuándo escucharemos que digan que disminuirá el tamaño del Estado? Eso no quiere decir que se queden sin asesores los políticos, sino que exista una asesoría imparcial con personas altamente experimentadas en los temas más relevantes.

Si deseamos dar mayor presupuesto a la salud, educación y vivienda, si debemos aumentar los ingresos, podríamos lograrlo disminuyendo gastos y no pidiendo préstamos de 100 millones y pagando intereses de 200 millones por tanta acumulación de deuda.

Mariuxi del Rocío Apolinario Cevallos
Guayaquil