La juventud cuenta hoy con mejor educación que cualquier generación anterior, pero hay 130 millones de jóvenes analfabetos en el mundo, unos 500 millones viven con menos de dos dólares diarios y 88 millones están desempleados, dice un informe de la ONU.
  
El Informe Mundial sobre la Juventud 2005 de las Naciones Unidas muestra un panorama de los 1.200 millones de jóvenes de 15 a 24 años que buscan cada vez más las luces de las ciudades, participan de actividades internacionales y sufren la influencia de los medios de comunicación globales más que la de sus familias y comunidades.
    
Si bien la diversidad entre los jóvenes en el mundo sigue siendo enorme, los procesos de urbanización y globalización, así como los avances en la tecnología de información y comunicaciones contribuyen al surgimiento de una nueva cultura juvenil global impulsada por los medios, dijo el subsecretario general para Asuntos Económicos y Sociales de la ONU, José Antonio Ocampo, en un prólogo al informe difundido el martes por la noche.
  
Pero el informe de 192 páginas destaca las diferencias siderales entre la vida y las oportunidades de los jóvenes en los países de Africa y Asia y los países ricos de Occidente.
  
Casi la mitad de los jóvenes de 15 a 24 años subsisten con menos de dos dólares diarios y más de 200 millones, el 18%, tratan de sobrevivir con menos de un dólar diario en 2002, la gran mayoría de ellos en Asia Oriental y el Pacífico y el Africa subsahariana, dijo el informe.
  
Millones sufren de desnutrición, pero la causa principal de muerte es el sida.
  
Diez millones de jóvenes _la mayoría de ellos en Africa y Asia_ viven con el virus VIH o sida, y   la epidemia afecta de manera devastadora la salud sexual y reproductiva de los jóvenes, que son los más vulnerables a la infección, dice el informe.
  
También halla que los jóvenes llegan antes a la adolescencia, se casan más tarde y tienen más relaciones prematrimoniales, aunque el embarazo precoz ha disminuido en muchos países.
  
La salud de los jóvenes también se ve afectada por el aumento sin precedentes del consumo de drogas sintéticas en el mundo, principalmente en entornos recreativos, sostiene el reporte.
  
Una nueva tendencia, dice, es que   la demanda de sustancias ilícitas entre los jóvenes de los países en desarrollo se ha elevado a los niveles típicos de los países industrializados. Los niveles de arrestos también son más altos en la franja de 15 a 24 años, y hay una participación desproporcionada de jóvenes en el aumento de conflictos violentos, sea como autores o víctimas.