El presidente de la Comisión Nacional de Arbitraje de Brasil, el ex juez Armando Marques, renunció ayer a su cargo antes de anunciarse oficialmente su destitución en el marco del escándalo de fraude de colegiados en el fútbol brasileño, confirmó la entidad.
Marques, cuya salida iba a ser anunciada por decisión de la Confederación Brasileña de Fútbol, se presentó en el departamento de la Comisión para despedirse de los funcionarios y anunciar su renuncia. En su lugar ingresaría el vicepresidente del organismo, el ex árbitro Edson Rezende.
Tras presentar la nómina de silbantes que actuarán el fin de semana por el Campeonato Brasileño, Marques limpió su escritorio para retirarse sin hablar a la prensa.
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Marques es una de las varias personalidades del fútbol brasileño que comenzaron a caer debido al escándalo por la denuncia de un esquema de sobornos a jueces, para que incidieran en resultados en favor de apostadores clandestinos.
Mientras, el ex árbitro Vanderlei Pololi fue detenido ayer, acusado de haber participado en el soborno a jueces para que alteraran los resultados de partidos en favor de apostadores clandestinos.
La policía de Sao Paulo detuvo a Pololi, de 52 años, en su casa de Piracicaba, en el interior del estado de Sao Paulo, bajo la acusación de haber servido de intermediario en el soborno de los árbitros.