Dos calendarios y 14 temas para la consulta

Dos calendarios con catorce temas para la consulta popular fueron expuestos por el ministro de Gobierno, Oswaldo Molestina, durante la reunión con la Comisión de Asuntos Constitucionales del Congreso, efectuada el miércoles pasado.

El Gobierno planteó que se adelante la consulta para el 27 de noviembre próximo, enviar al Parlamento el cuestionario, para su calificación de urgente, la primera semana de octubre y paralelamente que el Tribunal Supremo Electoral convoque al proceso, el 4 de octubre.

Pero la iniciativa no prosperó. Los legisladores protestaron porque aún no existen textos consensuados y tampoco las consultas previas en los bloques.

El segundo calendario fue el ya anunciado por el Presidente de la República, es decir, realizar la consulta el 11 de diciembre, para lo cual el Parlamento deberá aprobar las preguntas el 6 de octubre y el TSE convocar al proceso de manera inmediata; la publicación de las preguntas se hará el 28 de octubre.

El interés en realizar el referendo antes de fin de año se debe al temor advertido por los políticos de que el proceso puede fracasar  si se posterga el plebiscito, pues el ciudadano en sus respuestas mediría la popularidad del Gobierno.

Otro de los planteamientos que hizo Molestina fue la instalación de una asamblea constituyente, lo cual fue rechazado casi por unanimidad. Luego se discutieron los temas que negociarán el Ejecutivo y Legislativo, que consta de catorce puntos.

El régimen insiste en la votación distrital uninominal; la revocatoria del mandato para el mandatario; el voto facultativo u obligatorio para el ciudadano. La creación de una sala de justicia electoral y un organismo técnico que se encargue de organizar los procesos.

La bicameralidad, donde la cámara del Senado tenga representación regional; y el Vicepresidente de la República pueda presidir la Cámara; la inhabilidad para que los ex mandatarios cesados puedan candidatizarse nuevamente. Y determinar que el pleno del Congreso sesione dos veces al año; el resto del tiempo actuará el plenario de las comisiones.

Además, facultar al Congreso para destituir a un funcionario público después de su censura; que para la elección del Contralor se necesite mayoría absoluta del Parlamento y no las dos terceras partes.

También, eliminar en la designación del Tribunal Constitucional la representación de las cámaras de la Producción y los organismos seccionales; levantar el candado constitucional vía consulta; y ratificar a la Corte Suprema de Justicia.