Multitudinarias marchas expresan su rechazo a la guerra en Iraq

Miles de opositores a la guerra en Iraq manifestaron el sábado para demandar el regreso de las fuerzas norteamericanas con protestas, canciones y homenajes a los muertos en Washington y otras ciudades de Estados Unidos y Europa.

Más de 2.000 personas se congregaron en el Ellipse horas antes de que la manifestación pasara por la Casa Blanca, la primera oleada de lo que los organizadores dijeron será la mayor manifestación realizada en la capital del país desde que comenzó la guerra.

El presidente George W. Bush no se encontraba en la ciudad sino supervisando los esfuerzos de recuperación de los huracanes entre Colorado y Texas.

Tenemos que involucrarnos, dijo Erika McCroskey, de 27 años, que llegó desde el estado de Iowa con su hermana menor y su madre para la protesta.

Bush mintió, miles murieron, expresaba un cartel.   Fin a la ocupación, rezaba otro.
Aunque los unía el sentimiento en contra de la guerra, muchos de los manifestantes tenían diferentes pensamientos políticos.

Paul Rutherford, un residente de Michigan de 60 años, manifestó que era republicano y había apoyado a Bush en las últimas elecciones y aún lo hacía, excepto por la guerra.

El presidente Bush necesita admitir que cometió un error en la guerra y hacer volver al país a los soldados, y seguir su trabajo, sostuvo.

Su esposa Judy, de 58 años, describió al derrocamiento de Saddam Hussein como una   misión noble, pero dijo que los soldados estadounidenses deberían haber salido de Iraq cuando se demostró que eran infundadas las acusaciones de que ese país tenía armas de destrucción masiva.

Encontramos que no había ninguna y aún estamos allí y gente inocente está muriendo todos los días, señaló.

Arthur Pollock, de 47 años, dijo que se opuso a la guerra desde un principio. Quiere que los soldados regresen, pero no todos al mismo tiempo.

Una multitud de unas 10.000 personas marchó en Londres para expresar su respaldo a la retirada de las fuerzas británicas de Iraq.

Ya basta, manifestó Lindsey German, funcionario de la Coalición Frenar la Guerra que organizó la marcha.   Ahora es tiempo, una vez más, de que la población británica dé un paso adelante y salga a las calles para insistir que no nos ignoren.

También se organizaron protestas en Los Angeles, San Francisco, Seattle, Florencia, Roma, París y Madrid.