Treinta y cinco de los setenta y seis barcos atuneros que hay en Manta, recién partirán hoy de la rada de este puerto en busca de peces, por la escasez de combustible que afrontó Manabí durante la semana pasada.

Estas embarcaciones debían zarpar desde el 12 de septiembre pasado cuando culminó la veda del atún.

La presidenta de la Asociación de Atuneros del Ecuador (Atunec), Lucía Fernández, aseveró que el 40% de la flota pesquera industrial que hay en Manabí estuvo afectada por la falta de combustible.

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“Algunos armadores (dueños de barcos) se descuidaron y las peticiones de combustible se acumularon. Hubo una sobredemanda que se irá solucionando de forma paulatina”, explicó la empresaria.

Tras la veda, la demanda mensual de diésel se duplicó de tres a seis millones de galones, “algo  difícil de suplir rápidamente”, según Fernández.

Pescadores artesanales
En el sector pesquero artesanal también hubo repercusiones. Alfredo Benítez, un armador, asegura que dos de sus tres barcos no pudieron zarpar por la falta de diésel durante la semana pasada.

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La situación mejoró a partir del jueves pasado cuando desde la terminal de Petrocomercial ubicada en Barbasquillo, en el sur de Manta, se empezó a distribuir combustible de forma fluida.

Por falta de combustible los distribuidores y comercializadores iniciaron una medida que incluyó el bloqueo del ingreso a este terminal para exigir una mayor dotación de combustible para Manabí.

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“Nos dan menos de lo que recibíamos hace quince años”, manifestó Carlos Sáenz, vicepresidente de la Asociación de Distribuidoras de Combustible de Manabí (Asodisma).

Según el dirigente, la demanda diaria de diésel en la provincia es de 400 mil galones al día, pero la cantidad que distribuye Petrocomercial es de 150 mil galones.

Tregua
Los manifestantes se reunieron la tarde del miércoles pasado con las autoridades de Petrocomercial en la ciudad de Quito. Tras la reunión establecieron una tregua.
“Esperamos que la cantidad que nos asignen sea la misma de la que nos daban hace tres meses, de lo contrario retomaremos el bloqueo”, expresó Sáenz.

La medida que protagonizaron los distribuidores y comercializadores hizo que la escasez sea mayor de lo normal en el puerto de Manta e incluso afectó a otros sectores como el parque automotor, porque las gasolineras no fueron surtidas durante dos días.

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