Más que seguro en algún momento usted ha transitado por la vía que conecta a  Guayaquil con la parroquia Chongón, incluso, al momento se  desarrollan nuevos programas de vivienda, centros educativos, zonas de recreo familiar, muchas con marcado renombre, lo cual significa desarrollo para esta parte de la ciudad; pero estamos sujetos a la suerte de las vías que nos conducen porque no registran seguridades.

A la vista se ven las carreteras bonitas, con grandes y frondosos árboles en la mitad de estas, pero son el alma mortal más silenciosa que aguardan cualquier imprudencia o descuido de los conductores. De lo que me he percatado, en los últimos meses todo accidente que ha ocurrido en el sector (desde Puerto Azul hasta el peaje a la costa) ha tenido consecuencias fatales.

Dentro de los planes de trabajo que lleva a cabo la Prefectura del Guayas no se menciona a esta vía; lo que sí está incluido es la ampliación a partir de las casetas de control y pontazgo hacia la costa.

Publicidad

Con diligencia de las autoridades de tránsito o del Municipio de Guayaquil nos podrían ayudar para que se mejore esta vía  utilizada por la mayoría de los ecuatorianos, quienes resultarían beneficiados. Hay que dar la oportunidad al Consejo del Guayas y que demuestre lo que dice tanta propaganda.

Ing. Arturo Pazmiño Lombeida
Guayaquil