El secuestro de un avión comercial, culminó este lunes a las 17H15 locales (22H15 GMT) en el aeropuerto de Bogotá, cuando los secuestradores, un hombre minusválido y su hijo, aceptaron abandonar la aeronave y subieron a un vehículo de bomberos, según imágenes en la televisión.
El avión, de Aerovías de Integración Regional (Aires), fue secuestrado cuando cubría la ruta Florencia-Neiva y Bogotá.
Los dos secuestradores fueron identificados como Porfirio Ramírez Aldana, y no Luis Ramírez como se identificó inicialmente, de 42 años, y Businhower Ramírez Reynoso, y no Linser Ramírez, de 23.
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El avión, un De Havilland Dash 8-300, no aterrizó en Neiva y fue obligado a dirigirse a Bogotá sin cumplir el itinerario por los dos Ramírez, al parecer bajo amenaza de hacer estallar algunos explosivos que lograron subir al aparato en la silla de ruedas.
Nueve pasajeros, entre ellos mujeres y niños, fueron los primeros en salir del aparato, cuando éste aterrizó en el aeropuerto de "Catam", vecino a "Eldorado", de la capital colombiana.
Poco después, los dos secuestradores permitieron bajar del avión a otro grupo de pasajeros y solamente permanecieron en el interior ellos y los pilotos, así como los integrantes de la comisión negociadora.
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Entre el pasaje viajaban los congresistas Reynaldo Duque González, secretario de la comisión de acusación de la Cámara de Representantes, y Luis Antonio Serrano Morales.
Durante casi tres horas, el aeropuerto de Bogotá fue cerrado y los vuelos que debían llegar a la capital colombiana fueron desviados a Cali, suroeste del país.
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En Cali, capital del departamento del Valle, precisamente, se encontraba en una reunión de trabajo el presidente colombiano, Alvaro Uribe, quien tras ser informado del secuestro, regresó a Bogotá.