“Bias”, así se llama técnicamente al “prejuicio en un tema general o específico, habitualmente producto de la predilección por un punto de vista particular o una ideología” (Wikimedia).
Probablemente, la acepción venga prestada de la estadística, donde “Bias” define a la distorsión sistemática en un estudio.

El “Bias” ocurre tantas veces, en tantos casos en nuestra televisión que bien se puede hablar de que es el principio fundamental de aquellos contenidos donde  la información está sesgada y la opinión tiene poco sustento.

Con ese panorama, los muchas veces peligrosos “bias” de los políticos tienen campo abonado. Como cuando Luisa Delgadillo entrevista al ministro de Gobierno, Mauricio Gándara, y le describe un panorama aterrador de ciudadanos que cruzan las puertas de sus casas en las tardes para dar un paseo familiar y automáticamente son víctimas de un crimen, un secuestro, un asalto. Un “bias” enorme basado en la ideología del miedo. Y, entonces, el ministro, en lugar de actuar con responsabilidad y relativizar semejante horror social, lo incendia y aporta su propio prejuicio: “El problema nos viene del Norte”, así en bloque y sin matices. La entrevistadora, entonces, ni corta ni perezosa habla de que si el peligro son los “colombianos” (también así, en bloque y sin matices), hay que buscar la forma de cerrar la frontera.

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Ahí se tiene ese “bias” extremadamente peligroso llamado xenofobia en expresiones de un alto funcionario (ahora jefe del gabinete) y de una periodista. Lo más patético de quienes ejercen sus prejuicios en pantalla es que no hay forma de ser coherentes: los xenófobos son los primeros que saltan cuando a los ecuatorianos nos maltratan en otras tierras o nos imponen severas visas como en México. Y los que celebran con la selección que la dirige… un colombiano.

El ser o no ser de las nuevas propuestas

IESS, regreso a la escuela  en la Sierra  y la victoria del Mundial, con el infaltable estribillo de fondo: “Ecuador, Ecuador, maravilla de selección”. Todos temas con los mismos enfoques que a esas alturas ya se han escuchado, visto y recordado mil y un veces en todos los espacios deportivos, noticiosos, cómicos y de reportajes. Pero se  repiten en un espacio que se autopresenta como una novedad: ‘De 09h00 a 10h00’ (Teleamazonas) que se define como un noticiero para lo positivo…

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Las novedades están en las junturas del noticiero, en las notas aquellas que no son la “noticia dura”, pero que marcan el giro hacia un noticiero más arrevistado:  las reseñas culturales, las notas sobre nutrición infantil y las crónicas de turismo urbano (aunque en la primera emisión fue un sobrevuelo sobre los lugares comunes de la ciudad).  ‘De 09h00 a 10h00’ tiene un reto: ¿Cómo tener noticias duras diferentes o con enfoques distintos y cómo
compaginarlas con el menú light, revistero o menos coyuntural? 
Si se logra resolver la ecuación, el nuevo programa puede ser una opción frente a los desgastados esquemas de los programas familiares que predominan en ese horario.

Semana a semana, en cambio, se asienta ‘La caja de Pandora’ de Rodolfo Muñoz, el programa que Ecuavisa emite a las 09h00 los domingos. El programa se asienta sobre un sólido trabajo de preproducción y de producción. La emisión de este domingo con el radiodifusor y líder forajido Paco Velasco fue revelador, refrescante y entretenido.

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Es notorio que cuando los personajes se prestan, el programa se densifica. Ahí está el “ser o no ser” de ‘La caja de Pandora’: Escoger bien los personajes o tener la habilidad suficiente para dar el giro inesperado que el nombre del espacio propone.