El gobierno colombiano adelanta un plan de emergencia para intentar solucionar con rapidez el corte de energía eléctrica que afecta a más de 2,3 millones de personas en el suroeste del país, debido a atentados guerrilleros contra torres de transmisión este lunes.

Tenemos torres prefabricadas y torres de emergencia para tratar de superar en el menor tiempo posible esta dificultad, anunció el ministro de Energía y Minas, Luis Ernesto Mejía.

Añadió que las fuerzas militares están tomando el control de las zonas donde en la madrugada fueron derribadas tres torres, que son clave para el suministro eléctrico de los departamentos de Cauca, Nariño y Putumayo.

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Según Mejía, los técnicos se demoran unas 30 horas en reparar cada una de las torres averiadas, una vez que el ejército toma el control de las áreas donde rebeldes cometieron los atentados.

Tras dinamitar torres de energía los guerrilleros suelen sembrar minas en las inmediaciones para detener el avance de las patrullas militares.

En un comunicado, la Empresa Interconexión Eléctrica S.A. (ISA) reportó el lunes la salida de operación en la madrugada de cinco circuitos de alto voltaje en una amplia área montañosa, lo que dejó sin electricidad a los departamentos de Cauca, Nariño y Putumayo.

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Por el mismo motivo, ISA adelantó que estaba realizando gestiones con Ecuador con el propósito de importar energía y reponer a la brevedad el suministro eléctrico en las regiones afectadas.

Sin embargo, el ministro descartó la importación de energía del país vecino, debido a que los ecuatorianos no tienen muchos excedentes de producción eléctrica.

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Un portavoz del ejército, que habló con AP a condición de mantener el anonimato, responsabilizó a rebeldes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) de la voladura de tres torres que provocaron el apagón.