La selección de Ecuador fue nuevamente la ‘culpable’ de enloquecer de alegría a 12 millones de ecuatorianos, quienes festejaron ayer en Guayaquil y en diversas partes del país el triunfo 2-1 ante Bolivia, en La Paz.

Una marea amarilla, azul y rojo de aficionados ecuatorianos salieron a las calles con banderas, tambores, celebrando con cervezas y coreando una frase que no se cansaron de repetir: “¡Ya estamos en el Mundial de Alemania!, ¡Que vengan los uruguayos!”.

Las muestras de alegría, las fiestas armadas sobre la marcha, fueron evidentes en sectores como la avenida Víctor Emilio Estrada, en Urdesa. Esa arteria se ha convertido, para miles de jóvenes de esa ciudadela, en un sitio ‘oficial’ de concentración cada vez que el combinado de Luis Fernando Suárez consigue un resultado favorable en la eliminatoria.

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En Riobamba también se vivieron momentos de algarabía.
Una vez que el árbitro argentino Héctor Baldassi decretó la finalización del encuentro centenares de riobambeños, con la bandera de la Tricolor, salieron en vehículos para recorrer toda la avenida Daniel León Borja. Mientras, otros hinchas gritaban: “¡Tin Presidente!, ¡Tin Diputado!”, en honor al autor de los dos goles del triunfo contra los bolivianos.

En el centro de Esmeraldas se desataron las celebraciones con caravanas motorizadas. En los barrios marginales, los aficionados sacaron televisores a la calle para ver el partido en grupo.

En Quevedo no hubo señal televisiva, pero al final la celebración fue total.