El brote de gripe aviaria en Rusia y Kazajstán, donde se encontró una cepa de la enfermedad que es peligrosa para los humanos, desaparece gracias a la cuarentena y al clima frío en las regiones fronterizas, dijeron ayer funcionarios.

Sin embargo, el jefe de inspectores veterinarios de Rusia alertó que el virus podría irrumpir en cualquier otro lugar del mundo en la próxima primavera boreal.