Mientras los medios estadounidenses muestran saqueos y cadáveres flotando en las calles inundadas de Nueva Orleans, el presidente de EE.UU., George W. Bush, sigue recibiendo críticas.

El alcalde de Nueva Orleans, Ray Nagin, arremetió enfurecido contra Bush y las autoridades federales, con quienes dijo habló sin éxito para acelerar el envío de tropas y autobuses para evacuar la ciudad.

“He estado por toda la ciudad y me siento muy frustrado, porque no somos capaces de obtener recursos y estamos desbordados en absolutamente todo, estoy cabreado”, dijo.

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“¿Me quieren decir que en un lugar donde probablemente hay miles de personas muertas y otros miles que se están muriendo cada día, no pueden encontrar la forma de autorizar los medios que necesitamos? ¡Vamos!”, prosiguió.

“Muevan el trasero y hagamos algo (...) es un desastre nacional”, añadió.

El diario The New York Times atribuye en parte la crisis al despliegue en Iraq de un tercio de los miembros de la Guardia Nacional de Luisiana, que no pueden ser usados para imponer el orden en Nueva Orleans.

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También los líderes negros del Congreso de EE.UU. exigieron una respuesta más rápida y eficaz del gobierno de Bush y tacharon de inaceptable que EE.UU. no responda con la misma agilidad y justicia en la reconstrucción de su territorio como en Iraq, destacando que la mayoría de afectados son negros y pobres.

“No es posible que la gente aparezca sentada junto a cadáveres, vivan entre sus propios excrementos y entre agua contaminada (...) al presidente de EE.UU. yo simplemente le digo que Dios no puede estar contento con nuestra respuesta” a la devastación causada por Katrina, dijo el legislador demócrata Elija Cummings.

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El cineasta Michael Moore, productor de películas que critican y ridiculizan al presidente de EE.UU., envió ayer una carta a Bush en la cual le pregunta
“Estimado señor Bush: ¿tiene usted alguna idea de dónde están todos nuestros soldados de la Guardia Nacional? Realmente podríamos usarlos ahora para el tipo de tareas para la cual ellos se alistaron, como la ayuda en desastres nacionales. ¿Cómo es que no están allí? ¿Dónde están los helicópteros, cuando miles de personas necesitan ser evacuadas de Nueva Orleans”.

“¡Vamos, son negros!, quiero decir. No es como si esto hubiese ocurrido en Kennebunkport”, agregó refiriéndose al lugar donde la familia Bush tiene una residencia de verano en el estado de Maine.

En respuesta a las críticas Bush dijo ayer que los resultados de las tareas de socorro son inaceptables, y prometió reforzar los esfuerzos.