El presidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva sufrió este miércoles una nueva derrota en el Congreso que, en contra de la posición del mandatario, aprobó un aumento salarial del 15% para los empleados del legislativo.
Lula previamente había vetado ese reajuste argumentando falta de presupuesto.
El presidente del Senado, Renan Calheiro, del aliado Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), anunció la decisión de los legisladores, que aprobaron mayoritariamente en votación secreta el reajuste salarial.
Del total de 439 diputados y 71 senadores que votaron el aumento salarial para los empleados de la Cámara de Diputados, 407 diputados y 61 senadores rechazaron el veto del mandatario.
En la votación del incremento salarial para los empleados del Senado, 370 diputados y 61 senadores se opusieron al veto de Lula, informó el servicio de prensa de la Cámara de Diputados.
Ante el resultado de la votación, que obliga al mandatario a firmar la ley de ese aumento salarial, el líder de la bancada en el Senado del gubernamental Partido de los Trabajadores (PT, izquierda), Aloizio Mercadante, anunció que el gobierno va a recurrir al Supremo Tribunal Federal (Corte Suprema de Justicia) para demandar la ley aprobada por el Congreso.
Esta decisión del Congreso se constituye en una nueva derrota legislativa para el presidente Lula, que este año ya ha sufrido varias, como la pérdida de la presidencia de la Cámara de Diputados para su partido, el PT, en febrero pasado.
En marzo también volvió a ser derrotado en el legislativo, cuando la mayoría oficialista en la Cámara de Diputados debió renunciar a colocar en votación un decreto que había provocado disensos en sus propias filas y fuertes protestas en la clase media por aumentar los impuestos a las profesiones independientes.
En mayo el PT sufrió otra derrota también en la Cámara de Diputados, que votó una figura propuesta por la oposición para integrar el entonces recién creado Consejo Nacional de Justicia (CNJ).