Pierluigi Collina anunció ayer la decisión de  renunciar a la Asociación Italiana de Árbitros de fútbol (AIA), en protesta por  la prohibición de actuar en la primera división a causa de su asociación  comercial con uno de los patrocinadores del club AC Milán.

“Decidí renunciar después de 28 años de servicio”, dijo Collina,  de 45 años, y señalado por futbolistas y observadores como uno de  los mejores árbitros.