Ayer, nuevamente unas 500 personas que protestan por la devolución del dinero de las entradas que compraron para el concierto de Marc Anthony, programado para el 11 de agosto pasado y que se suspendió, se reunieron en las afueras del estadio Olímpico Atahualpa, desde las 15h00, e interrumpieron el servicio de la Ecovía y el tránsito en general.

Cerca de diez policías portando bombas lacrimógenas llegaron al sitio en el que hasta las 16h30 no hubo incidentes.

Ayer fue el tercer día de reclamos  de las personas que compraron los boletos, entre 20 y 120 dólares, y que mostraron su indignación por el incumplimiento de la devolución. Una de las perjudicadas, Adriana Castro, presentó el pasado martes ante el fiscal de Delitos Misceláneos de la Fiscalía de Pichincha, Fernando Guerrero, una denuncia por estafa contra los  directivos de las empresas organizadoras Total Entertaiment y Alianza Total Entertaiment: Geovanny Barbosa, Diego Garrido y Joffre Verduga.

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Ellos eran los encargados del espectáculo  que se suspendió por desacuerdo técnico y financiero entre los representantes del cantante y las empresas mencionadas.

Castro denunció que el pasado lunes una de las encargadas de las devoluciones del dinero firmó tres cheques de 105, 150 y 550 dólares, supuestamente, sin fondos.

Al grito de “devuélvannos la plata”, las personas continuaron con su protesta hasta pasadas las 16h30; a esa hora ninguna de las siete boleterías atendió al público; tampoco alguno de los representantes de las empresas se presentó en el lugar.

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Diego Garrido, representante de una de las empresas organizadoras, indicó que estaba previsto devolver el dinero desde el pasado lunes hasta el próximo domingo.

Al sitio se hizo presente una representante de la Defensoría del Pueblo.