Gran Bretaña publicó ayer las prohibiciones para la entrada a los extranjeros que cree inspiran el terrorismo, dentro de las amplias medidas que tomó contra clérigos islámicos luego de los atentados del mes pasado en Londres.

Las medidas podrían motivar deportaciones o prohibiciones de ingreso a quienes expresen “puntos de vista que fomenten, justifiquen o glorifiquen la violencia terrorista en la persecución de creencias particulares y en la búsqueda de instigar actos terroristas”.