La rapidez con que se producen los deshielos en el Ártico se está acrecentando y un grupo de investigadores sostiene que no vislumbra que pueda producirse un proceso natural que revierta esa tendencia.

En un siglo, los deshielos podrían transformar las características de la zona en un escenario similar al de un verano sin hielo, el cual no se había presentado en el área en millones de años, señaló el martes el grupo de expertos.

El derretimiento de glaciares podría llevar mucho más tiempo, pero incrementaría el nivel de los mares y afectaría potencialmente a las regiones costeras de todo el mundo.

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Y los cambios de las capas subterráneas de hielo podrían derribar edificios, arrastrar agua por las alcantarillas y liberar más carbono en la atmósfera.

“Lo que en realidad hace que el Ártico sea distinto al resto del mundo no polar es el hielo permanente en el suelo, en el océano y en la tierra”, dijo Jonathan Overpeck, de la Universidad de Arizona y presidente del Comité de Ciencia del Sistema Ártico de la Fundación Nacional de Ciencias, que reveló el informe.

Los resultados del estudio los publicó el martes la revista semanal Eos, de la Unión Geofísica estadounidense, y se producen días después de que funcionarios y los ministros del ambiente de 23 países se reunieron en Groenlandia para exhortar a los gobiernos que dejen de discutir sobre el calentamiento global y comiencen a actuar.

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Esa reunión se realizó en el pueblo de Ilulissat, cerca del límite glaciar Sermeq Kujalleq, que se ha reducido casi 11 kilómetros desde 1960 y se ha convertido en el símbolo del temor de que el planeta esté cerca de un peligroso calentamiento global.

En el pasado, el clima del Ártico incluía periodos glaciales con capas de hielo que se extendían hacia América del Norte y Europa, y en épocas con relativo calentamiento.

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Los científicos dijeron que no ven ningún mecanismo natural que pueda impedir la total pérdida del hielo.

Capa de ozono
La situación de la capa de ozono podría empeorar en los próximos cinco a diez años, pero luego mejoraría en la medida en que los gases que han provocado su deterioro desaparezcan de la atmósfera, afirmó  un experto de la Organización Meteorológica Mundial.

Los estudios hacen prever asimismo que el agujero de la capa de ozono aparece cada año al menos hasta mediados de este siglo.