Desde la constitución de la primera fundación por iniciativa municipal -Malecón 2000- estos organismos han estado presididos por personas que, si bien no han intervenido en política electoral, reconocen ser muy cercanos a los líderes del Partido Social Cristiano, León Febres-Cordero y Jaime Nebot.

Ellos son el abogado argentino Pedro Gómez Centurión, ex gerente general de Filanbanco, quien preside desde hace ocho años la fundación Malecón 2000, y el ingeniero Wilfrido Matamoros, quien desde el 2001 gerencia Guayaquil Siglo XXI, entidad ejecutora de los planes de regeneración urbana de la alcaldía de Jaime Nebot.

Ambos ejecutivos coinciden en que la acción que desarrollan es básicamente técnica y que ellos son “apolíticos”. Pero están seguros que gozan de la confianza necesaria de los líderes del Partido Social Cristiano para continuar adelante en su trabajo.

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Bajo su cargo están la administración y mantenimiento de las obras municipales más destacadas de los últimos años: Malecón 2000, Malecón del  Salado y el proceso de regeneración de barrios y calles.

La fundación Malecón 2000 cuenta con un presupuesto de alrededor de diez millones de dólares anuales -que se financia con sus ingresos propios-.

Guayaquil Siglo XXI depende de las asignaciones que le otorgue el Municipio. Al año, esa cantidad es de 36 millones de dólares (30 para la inversión de nuevas obras y 6 para el mantenimiento de las entregadas).

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Gómez Centurión insiste en que su fundación “no es municipal”. No puede decir lo mismo Matamoros que además aclara que Guayaquil Siglo XXI recibe de Malecón 2000 los estudios de los proyectos que concreta.

Wilfrido Matamoros reveló que por su trabajo gana alrededor de $ 3.500 mensuales; Gómez Centurión, en cambio, no dio a conocer el monto “por cuestiones de seguridad”, según justificó. Eso sí, señaló que completa sus ingresos con los trabajos de su consultora particular.