Tras varias semanas de redacción y ásperas negociaciones, el proyecto de Constitución iraquí fue presentado en la noche del lunes al Parlamento, dentro del plazo fijado, pero aún subsisten  divergencias que deben ser resueltas en un término de tres días, se anunció.
  
La primera Constitución de la era post Saddam Hussein fue presentada al Parlamento bajo la intensa presión de Estados Unidos, justo pocos minutos antes de que expirara el plazo fijado, pero con varios puntos aún sin resolver,  declaró el presidente de la Asamblea, Hajem al Hassani.
 
"El proyecto fue presentado tal como se había prometido al pueblo iraquí (...) pero subsisten puntos de divergencia y serán resueltos en los tres  próximos días", declaró Hassani, un sunita.
  
En una conferencia de prensa, el presidente del Parlamento precisó que esos puntos conciernen el federalismo y los mecanismos de formación de regiones autónomas, la calificación del Baas, el partido del presidente derrocado, y la  clarificación de las prerrogativas del presidente, del jefe del gobierno y del presidente del Parlamento.
  
Asimismo afirmó que el asunto de las repartición de las riquezas petroleras había sido solucionado, y que sería efectuada por el gobierno central de  acuerdo con las regiones.
  
La sesión del Parlamento que recibió el proyecto duró apenas cinco minutos  y fue abierta 10 minutos antes de que expirara el plazo adicional de una semana dado a los dirigentes políticos para zanjar sus discrepancias sobre el texto constitucional.
  
El representante kurdo Barham Saleh confirmó en una declaración al canal de  televisión Al-Arabiya, basado en Dubai, la persistencia de desacuerdos sobre algunos puntos e indicó que estos serán discutidos en los próximos días.
  
Tras el acuerdo logrado entre los dos bloques parlamentarios mayoritarios (chiítas y kurdos) el borrador de la Constitución estaba listo para ser  presentado, aun cuando no contó con la aprobación de los sunitas.
 
"Las discusiones continúan con los hermanos sunitas. Una parte de ellos está de acuerdo con nosotros, y la otra sigue rechazando el federalismo", indicó Jawad el-Maliki, número dos del partido chiíta Dawa del Primer ministro  Ibrahim Jaafari.
  
Un influyente diputado chiíta, Jalaleddin al-Saghir, precisó que los  sunitas estaban divididos en tres tendencias: los que aceptan el federalismo, los que platean condiciones y los que lo rechazan categóricamente.
  
Según él, el proyecto adopta fórmulas de compromiso sobre el papel que debe jugar el Islam, recalcando que ninguna ley puede ir contra sus preceptos, ni siquiera los derechos humanos. Y aun cuando el proyecto consagra el carácter federal de Irak, no menciona el derecho a la autodeterminación exigida durante un tiempo por los kurdos, indicó Saghir.
  
Según Maliki, el texto fija un plazo de dos años para la normalización de la situación en Kirkuk (norte), ciudad multiétnica y petrolera, arabizada bajo Saddam Hussein y reivindicada por los kurdos, y consagra la pertenencia de Irak  al conjunto de naciones islámicas y árabes.
  
Por otro lado las exportaciones de crudo iraquíes se reanudaron este lunes, tras una interrupción de 16 horas debida a una avería eléctrica provocada por  un sabotaje, indicó un funcionario del sector petrolero en Basora (sur).
 
"Las exportaciones se reiniciaron a las 16H00 locales (12H00 GMT), ya que los equipos de la Sociedad de Petróleo del Sur (SOC) y los de la compañía  nacional de electricidad consiguieron realimentar las estaciones de bombeo",  declaró a la AFP Samir Jassem Maksufi, portavoz de la SOC.
  
El ministerio de Petróleo en Bagdad había confirmado a mitad de la jornada la interrupción de las exportaciones, que atribuyó a un sabotaje.
  
"Las exportaciones se interrumpieron este lunes a las 00H00 locales (20H00  GMT del domingo) a causa de la presión sobre la red eléctrica provocada por un  acto de sabotaje", declaró el portavoz del ministerio de petróleo en Bagdad  Assem Jihad.
 
En lo que respecta a la violencia, al menos 28 iraquíes, entre ellos ocho policías y siete soldados, murieron en varios ataques el lunes en Irak, informaron fuentes de la seguridad pública.
  
Dos soldados estadounidenses murieron y otros dos resultaron heridos este lunes por la explosión de una bomba artesanal al norte de Bagdad, en una zona  de fuerte actividad insurgente, anunció el ejército de su país en un  comunicado.