Los productores de ‘Día a Día’, los conductores y entrevistadores Rodolfo Asar y Milagros León hicieron uno de los mejores especiales que se han podido ver últimamente en la TV ecuatoriana, porque la mitificación del campeón Jefferson Pérez dio paso al retrato de un ser humano que en su excepcionalidad tiene sus altos y bajos, sus virtudes y defectos.

El especial se presentó el fin de semana en dos ocasiones y valió la pena, porque se trató de un trabajo con investigación de sustento que sirvió para preparar una entrevista en profundidad. Pérez fue cuestionado sobre su vida y obra, pero también puesto ante un espejo para que reconozca sus muy humanas carencias.

Al fin se emitió en la TV ecuatoriana un especial a la altura del atleta de talla mundial que tenemos, aunque el programa no dejó de ser algo débil en lo estrictamente deportivo, aspecto que pide un programa de TV a gritos, porque ahí la excepcionalidad de Pérez aún no ha sido explicada en toda su dimensión.

Publicidad

Ya que ningún espacio deportivo del país ha logrado ni siquiera acercarse al fenómeno Pérez sin caer en la adulación o en el calificativo sin contenido, resulta irónico que durante la transmisiones del fin de semana en Canal Uno, se hayan autoelogiado como la única estación que estuvo con Jefferson… Concepto que revela cómo se concibe el trabajo periodístico en ciertos círculos. Porque, ¿acaso se trata de “estar con”? ¿No será más bien que el periodismo tiene como objetivo “informar acerca de”, “explicar que”, “revelar la verdad de”, “cuestionar que”, “investigar a”…?

Todo lo contrario: el “estar con” pone de manifiesto toda la pobreza del deseo televisivo en su vergonzosa desnudez.

El fin no justifica a los medios
Si se observa con atención, el “estar con” es la norma a la que responde gran parte del periodismo de TV, no solo deportivo. Lo grave es que asumirlo de esa forma implica la fundamental renuncia a hacer periodismo, entendido como la búsqueda de la verdad.

Publicidad

Así, con el camino despejado, se toma el atajo del “estar con” que significa ir por las pantallas haciendo campañas, haciendo trámites, haciendo política, haciendo caridad, pretendiendo hacer justicia por la propia cámara… Es decir cualquier cosa, menos lo que la sociedad exige del periodismo: buscar y contar la verdad.

Es cuando el escenario se vuelve propicio para que pase lo que pasa con los noticiarios de Teleamazonas y su ‘Corte Ideal’. Alineados junto a la Comisión Calificadora minimizan los cuestionamientos sobre lo tramposo que es cambiar las reglas de selección de magistrados a mitad del proceso, para más bien sobredimensionar un error de procedimiento de un miembro de la Comisión Anticorrupción que denunció un posible conflicto de intereses de alguna de las empresas auditoras… En la campaña de Teleamazonas por encontrar “una corte ideal”, ¿hasta dónde prevalece la búsqueda de la verdad y hasta dónde rige la consideración de que el “Ecuador no puede seguir siendo junto a Eritrea el único país sin Corte Suprema de Justicia”, como muy bien opinó Jorge Ortiz luego de la entrevista con Fernando Rosero?

Publicidad

O en otras palabras: ¿hasta qué punto están dispuestos informativamente a echar bajo la alfombra los escombros que deje la Comisión de Calificación en consideración al argumento político de que necesitamos una “corte ideal”? Entonces, solo por si acaso, hay que recordar que en periodismo, jamás los fines justifican los medios.