Las celdas del CDP tienen capacidad para 160 detenidos. Sin embargo, actualmente existen 434 reos.

El paro carcelario que mantienen los reos de las 35 prisiones del país, desde el 20 de junio pasado, provocó hacinamiento en los centros de detención provisional de la Penitenciaría del Litoral y los calabozos de las policías Judicial del Guayas (PJ-G) y Antinarcóticos.

Para presionar a los diputados para que deroguen la detención en firme, la cual permitirá liberar a quienes tengan más de un año sin sentencia, y para que se aplique el 2x1 (rebaja del 50% de las condenas cumplidas), los internos no permiten la entrada a las cárceles a nuevos detenidos, por lo que las autoridades los mantienen aislados en celdas provisionales.

Los parlamentarios deberán definir estos temas cuando retornen de la vacancia legislativa el 23 de agosto próximo.

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Ese es el caso de los 10 detenidos por la Policía Antinarcóticos, el 2 de agosto pasado, en el operativo Bellavista, luego  que se encontraron 127.099 gramos de cocaína en una casa ubicada en Tulcán, entre Brasil y Gómez Rendón.

Los apresados fueron Alejandro Avilés González-Artigas, Víctor Hugo Peñafiel Morán, Fausto Javier Casquete Zamora, Omar Josefi Muñoz Vera, Washington Walter Zambrano Casquete, Jorge Guillermo Carrera Checa, Julio César Freire León, José Domingo Pazmiño Baidal, acusados de narcotráfico; y Wiston Fidalfo Bennett Valencia y Francisco Manuel Olivo Vite, por tenencia ilegal de armas.

Avilés está en el Centro de Detención Provisional (CDP) de la Penitenciaría desde el pasado miércoles y los nueve restantes están divididos entre la PJ-G y Antinarcóticos.

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Las celdas del CDP tienen capacidad para 160 detenidos, repartidos en dos celdas comunales, cada una para 80 presos. Sin embargo, actualmente hay 434 reos que aún no pueden ser trasladados a la Penitenciaría, que tiene capacidad física para 1.100 detenidos pero hay 3.470, según el director encargado de la institución, Carlos Luis Tamayo.

El funcionario dijo que los internos advirtieron que esta situación se mantendrá hasta que el Congreso incluya en el orden del día de las sesiones legislativas el segundo debate de la Ley de Ejecución de Penas.

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El problema es similar en los calabozos de la PJ-G, en la que hay siete celdas donde se puede albergar a 120 detenidos, según informó el jefe de esa unidad policial, coronel Rafael Yépez, pero hasta ayer se contó a 200 personas. En Antinarcóticos, con capacidad para 40 personas, están detenidos 99 sospechosos.