Con mucha preocupación veo a diario cómo los negocios informales se toman las calles y aceras de la ciudadela Sopeña a vista y paciencia de las autoridades. Me pregunto si es necesario que exista algún muerto o herido para que estas tomen cartas en el asunto.

Ni qué decir de quienes pululan en los parques por las noches.

Ec. Mauricio Pérez
Guayaquil