Las renuncia de Rafael Correa al Ministerio de Economía fue generada, a criterio de Eduardo Delgado, “por las presiones que se dio por las élites del poder político y económico, y por las ejercidas por la Embajada norteamericana, quienes se niegan a aceptar cambios que involucren reorientar la economía nacional”.

“Este gobierno no está escuchando a los sectores sociales ni a las voces que claman por un cambio profundo", señaló el dirigente social y miembro del movimiento Ecuador Decide, en Citynoticias (89.3 FM de Guayaquil), al indicar la manera como percibe el accionar del Gobierno.

"La decisión de Palacio deja mucho que desear”, señaló Delgado. Dijo que la intención de "la revolución de abril que luchó porque se dejara de lado la politiquería para hacer la nueva política está echada al traste”.

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Con la salida de Correa, de acuerdo a Delgado, se reactivarán los gritos “que se vayan todos”. Esta frase fue con la que se distinguió a los manifestantes que protestaron en los días previos a la salida del ex presidente Lucio Gutiérrez.

"Palacio no era el hombre de los forajidos, fueron las circunstancias y el marco legal los que lo llevaron al poder", indicó Delgado, al aclarar que la mayoría del movimiento de los forajidos, quienes protestaron en las calles, no respaldaban la presidencia de Palacio.

Delgado advirtió que “la mayoría de los afiliados nunca estuvo conforme con la salida que se dio en abril”. Por ello, propuso que se conforme una Asamblea Constituyente soberana sin la participación de “los mismos”. El propósito del dirigente social es que al posesionarse esta instancia se cese en su función a los diputados, para que el poder vuelva al pueblo.

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La estabilidad de un gobierno depende de la calidad de éste y de la capacidad de escuchar y de reorientar la política a favor de la mayoría que los gobernantes tengan, a criterio de Delgado. Explicó que lo importante es que los dirigentes del país estén a favor de la mayoría y "no de pequeños grupos o intereses particulares".

Delgado sostuvo que en el país existe una indignación por la situación que se vive. Hay un “sentimiento de que la politiquería ha afectado a la calidad de vida de los ecuatorianos”.

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Finalmente, Delgado enfatizó que “si la administración de Palacio quiere seguir adelante con un proyecto de gobierno, debe escuchar al pueblo”. Advirtió que “la única manera de que se sostenga un gobierno es que se escuche al pueblo, no dejándose secuestrar por los pequeños intereses de poder”.