Solo el 1% de los inmuebles en el Centro Histórico de Quito tienen extintores, hay altillos convertidos en bodegas y los sistemas eléctricos están en pésimo estado. Esa fue la conclusión de las inspecciones realizadas por funcionarios del Municipio de Quito, Cuerpo de Bomberos y de la Empresa Eléctrica.

El martes pasado seis grupos realizaron recorridos para inspeccionar 45 inmuebles y varios almacenes de las calles Mideros, Cuenca, Chile e Ipiales. Esto, nueve días después del incendio producido en una casa en la que funcionaban almacenes de electrodomésticos y ropa en el Centro Comercial El Tejar.

La idea, según Jaime Benalcázar, jefe del Cuerpo de Bomberos de Quito, era realizar inspecciones a fin de prevenir nuevos siniestros.

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En el restaurante Gran Bey (Chile y Cuenca) se detectó poca ventilación, cilindros de gas en la cocina y el cableado desordenado y a la vista.

En el pasaje Sanguña, muy cerca de donde se inició el incendio, se observó la existencia de cableado a la intemperie, sostenido por varas de madera que en caso de cortocircuito o sobrecarga se pueden incendiar fácilmente.

El bombero Jaime Benalcázar dijo que en 60 días se hará una reinspección de los locales notificados. Si no han acatado las recomendaciones, no obtendrán los permisos de funcionamiento.